Zona Satelite!!

Sevilla Fútbol Club y Atlético de Madrid se vieron las caras este domingo en el Ramón Sánchez-Pizjuán con motivo de la jornada 30 de LaLiga EA Sports, un partido que se resolvió en el tiempo de descuento gracias a un fantástico disparo de Pablo Barrios.

La derrota del Real Madrid, a sólo tres puntos, y el empate del Barcelona, ahora a siete unidades, daban una vida extra al cuadro dirigido por Diego Pablo Simeone en la lucha por el título liguero. Cierto es que el escenario, el Ramón Sánchez-Pizjuán, no era el más asequible y cómodo pese a la involución de una entidad que trata de apagar incendios casi a diario. Los dos últimos equipos españoles que conquistaron la Europa League, frente a frente en Nervión.

Y menudo día eligió Lucien Agoumé para estrenarse como goleador en su carrera profesional. En una buena acción colectiva, el centrocampista llegó al área como un miura y tiró de interior para enviar el balón a la red sin que Jan Oblak pudiera hacer nada por frenar su trayectoria. Felicidad y alegría en el Pizjuán... hasta que se dio a conocer la letra pequeña y el costoso peaje: Ruben Vargas se había lesionado al asistir de tacón.
Julián, a un toque

Los hombres de Diego Pablo Simeone no salieron como se presuponía, especialmente dado el contexto tras lo ocurrido a lo largo del fin de semana. Nahuel Molina se encargó de evidenciar que los rojiblancos sí estaban sobre el terreno de juego al finalizar una jugada que se fabricó a base de paciencia y mimo. Entretanto, Chidera Ejuke, sustituto del extremo suizo y más tarde reemplazado, amenazaba por la banda izquierda sin encontrar rematador a su envío.

Los colchoneros apenas estaban inquietando y, sin embargo, disfrutaron de una pena máxima a favor después de que Loïc Badé atropellara a Conor Gallagher. El encargado de ejecutar el lanzamiento fue Julián Álvarez, que esta vez golpeó con firmeza y el tanto subió al marcador (24'). Cambió el resultado, no así la sensación de superioridad de los hispalenses, quienes tuvieron hasta dos oportunidades claras para tomar ventaja de nuevo, con Akor Adams como actor principal.
Remontada de peso

Al descanso se llegó con "Directiva, dimisión", cántico que luego se tradujo en "(Del Nido) Júnior, vete ya". Ni Pimienta ni el Cholo parecían del todo satisfechos, así que ambos llevaron a cabo modificaciones: Nemanja Gudelj y Javi Galán, los elegidos. El técnico argentino no tardó mucho en incorporar a dos futbolistas más, el ya recuperado Koke Resurrección y el suplente de lujo Alexander Sorloth, pese a tener que sacrificar a un desaparecido Antoine Griezmann.

El Sevilla había empezado el segundo acto a buen nivel, si bien Giuliano Simeone tuvo una buena oportunidad tras regatear a Kike Salas con una fusión de potencia y garra. El ritmo siguió siendo elevado, aunque lo cierto es que las llegadas disminuyeron de forma drástica mientras avanzaba el cronómetro. El reparto de puntos no dejaba satisfecho a ninguno de los implicados porque los trenes por Europa y por el título no esperan a viajeros remolones.

Saúl Ñíguez, autor de una diana y seis asistencias en la actual temporada, entró a los 69 minutos en un envite muy especial para él debido a su extensa trayectoria como jugador del Atleti, que aún posee sus derechos. Olieron la sangre los de la capital en el tramo final al ver la concatenación de errores de un plantel que, ya fatigado, empezó a sufrir y acabó lamentando el buen hacer de Pablo Barrios en el añadido. Conducción sensacional y pase a la red desde la frontal para seguir soñando (1-2).