Zona Satelite!!

El Girona desaprovechó la ocasión de meterse en la pelea por el 'play off' de la Champions tras caer a domicilio ante el Sturm Graz (1-0). Un gol de Biereth a los 58 minutos fue suficiente para los austriacos, que dejaron muy tocados a unos 'Gironins' que se están acordando del fallo en línea de gol de Iván Martín en el primer acto.

Vaya mazazo se ha llevado el Girona. Los 'Gironins', obligados a ganar al Sturm Graz para seguir vivos en la lucha por el 'play off' de la Champions, sufrieron un duro revés en territorio austriaco. Buena parte de culpa es de Biereth, que se encargó de poner la rúbrica a la primera victoria de los de Jürgen Säumel.

El equipo de Míchel fue de más a menos durante el encuentro y acabó pagando su pobre puntería entre los tres palos. Todavía sigue en los pensamientos de los 'Blanc-i-Vermells' esa acción de Iván Martín con 0-0 en el primer tiempo. El mediocentro, a menos de un metro de la línea de gol, desperdició una oportunidad clara para haber adelantado a los suyos. Esto es lo que tiene el fútbol. Al fin y al cabo, el que gana siempre es el que es capaz de meter la pelota en la portería contraria.
De más a menos y al revés

El Girona era consciente de lo que se estaba jugando y salió decidido a por el partido desde el primer minuto. El conjunto de Míchel se hizo con la posesión para intentar maniatar al Sturm Graz y poder adelantarse en el marcador cuanto antes. Sin embargo, el cuadro catalán no logró su propósito y eso que tuvo una opción muy clara.

Pero antes de llegar a ese punto, Bryan Gil tomó el liderazgo de su equipo. El atacante, un futbolista con muchísimos recursos, no cesó en su empeño de encarar a sus adversarios y puso en aprietos a la defensa austriaca. A los 10 minutos ya avisó en una acción individual en línea de fondo y poco después maravilló tras driblar a dos futbolistas en unos metros.

Su siguiente puesta en escena fue ya en la mejor ocasión de los 'Blanc-i-Vermells'. A los 23 minutos, Blind metió un pase en profundidad para un Iván Martín que, ya pisando el área, buscó al segundo palo a Miovski. Un defensor rechazó y el propio Bryan Gil, que rompió a un oponente, se plantó en línea de fondo y se atrevió a tirar un túnel por debajo de las piernas del guardameta. Iván Martín, prácticamente en la línea de gol, falló lo infallable: le dio con el interior del pie derecho y el balón se marchó por encima de la portería.

A partir de ese momento, el Girona bajó sus prestaciones y se mostró más cauto, lo que aprovechó el Sturm Graz para crecer. El cuadro austriaco ganó metros y obligó a los 'Gironins' a perder el hilo del encuentro. Böving fue el más destacado de los locales, aunque tuvo una buena oportunidad pasada la media hora que se le escapó en última instancia. Lavalée también lo intentó cerca del 40' con un disparo que atrapó en dos tiempos Gazzaniga.
El remate final

Tras la reanudación, el Girona tuvo dos acercamientos peligrosos que terminaron con un remate forzado de Tsygankov al lateral de la red y un gol anulado, el de Miovski, tras inventarse el macedonio un taconazo dentro del área. Al Sturm Graz pocó le importó esas situaciones, ya que acto seguido se adelantó en el marcador.

Chukwuani filtró un balón a Jatta, que recibió muy solo y tiró un recorte a un rival para soltar un latigazo que desvió Gazzaniga. La pelota quedó muerta y Biereth, que ejemplificó lo que es la figura del '9', fue al rechace y metió la punta de la bota para hacer el 1-0.

El Girona, que apenas estaba sufriendo, se llevó un duro golpe porque no contaba con el tanto del campeón austriaco. Al equipo de Míchel le tocó espabilar para intentar reengancharse al encuentro sin éxito alguno. A los 'Gironins' les faltó personalidad en ataque y también la implantación de sus mecanismos tácticos para cambiar el curso del encuentro. Se echó de menos su juego de vértigo.

El panorama se puso terrorífico y ni las sustituciones sirvieron de mucho a los visitantes. Stuani lo intentó en varias ocasiones, pero no fue capaz de hacer cosquillas al portero. La más clara que tuvo fue un testarazo muy forzado que se marchó cerca de la escuadra izquierda.

El Sturm Graz, sabedor de que tenía que jugar con el Girona, se echó hacia atrás y dejó hacer a su inoperante rival, al que le costó mucho llegar al área contraria. Profunda decepción de los 'Blanc-i-Vermells', a los que no se les olvidará tan fácilmente ese gol que se le escapó a Iván Martín. Su continuidad en Europa se complica -30º con 3 puntos-, mientras que los austriacos, con su primer triunfo, intentarán mantener su sueño vivo.