Zona Satelite!!

El Leganés se encontró con una victoria ante el Sevilla cuando ni ellos mismo se lo esperaban. Los 'pepineros' ganaron a los hispalenses por 1-0 gracias al solitario tanto de Miguel de la Fuente desde el punto de penalti. Agoumé fue el protagonista negativo para los de García Pimienta tras provocar una pena máxima infantil en un error en una cesión hacia el portero.

La vida presenta multitud de ocasiones en las que a uno le apetece ser protagonista. De hecho, se merece ser protagonista. Sin embargo, hay otras tantas en las que, con cautela y sin hacer ruido, es mejor mantenerse en un segundo plano. Algo muy similar se puede aplicar al partido de esta noche en Butarque, donde ni Leganés ni Sevilla estaban siendo protagonistas de nada, pero donde Agoumé se erigió como el personaje negativo de la noche, sobre todo para su equipo, con un penalti infantil que dio alas y la victoria a los locales.

El conjunto de García Pimienta salió con intención y con ganas de dominar. Eso, en parte, fue cierto, pues la posesión de la pelota fue para los andaluces. Eso sí, otro aspecto que también es verdadero es que, por mucho que lo intentó, las ocasiones apenas llegaron.

El Sevilla solo generó peligro a balón parado, con centros desde la esquina, una prolongación al segundo y, con suerte, un remate. Así las tuvieron Agoumé, que no llegó, y Kike Salas, que no le dio la dirección adecuada a su cabezazo.

No las tuvo consigo tampoco el Leganés, cuyas llegadas a la portería de Álvaro Fernández fueron con cuentagotas. La mejor llegó en el minuto 28, con un balón filtrado a De la Fuente y un remate fuerte abajo que fue repelido por el meta sevillista. Y también la tuvo Munir apenas 3 minutos después, con una falta ajustada al primer palo que acabó pegando en el lateral de la red y dando el susto a los seguidores de Nervión.

El primer tiempo llegó a su fin con dos equipos muy pausados y con falta de fluidez y ritmo. Nada que no se pudiese solucionar en los segundos 45 minutos, aunque eso aún estaba por ver.

El segundo tiempo arrancó con la misma sintonía del primero. El Leganés llegaba ligeramente por las bandas, sobre todo la izquierda, donde Franquesa parecía incansable. En el otro lado, Lukébakio era quien llevaba todo el peso ofensivo de un Sevilla al que le siguió faltando acierto. La intención estaba, pero con eso no siempre es suficiente.

El partido entró en su recta final y con la entrada de Jesús Navas, que cumplió su partido número 700 con el Sevilla, el conjunto de García Pimienta ganó en frescura y atrevimiento, pero nada más lejos de la realidad. Un error lo puede cambiar todo.

En el minuto 80, Agoumé se equivocó en una entrada hacia Álvaro Fernández que se quedó corta. El acto reflejo del centrocampista fue el de agarrar a Cissé por la espalda, provocando el penalti y yéndose a las duchas tras su roja directa. De la Fuente tiró a asegurar y aseguró que el 1-0 subiría al marcador del Lega.

Este tanto terminó de bloquear al Sevilla, que lo intentó, pero ya fue demasiado tarde. Los tres puntos se quedaron en Butarque y el Leganés se llevó la alegría antes del parón ante la profunda decepción sevillista tras su 2ª derrota consecutiva en Liga y el 6º encuentro que no gana lejos del Sánchez-Pizjuán.