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Tener aparatos inalámbricos, aporta una mayor comodidad. Sin embargo, también puede haber limitaciones. Podemos tener problemas de rendimiento, velocidad, interferencias... Por ello, siempre conviene conocer exactamente cómo va a funcionar algo y así poder elegir el producto para no cometer errores.


Los puertos HDMI son muy utilizados para conectar dispositivos a una televisión, como puede ser un ordenador portátil o un teléfono móvil. De esta forma, podemos enviar vídeo de un aparato a otro y reproducirlo en una pantalla mayor. Pero está también la opción de tener dispositivos inalámbricos y el funcionamiento es similar.

Tener una opción inalámbrica, significa que no vas a tener que conectar un cable directamente entre ambos dispositivos. Como el Wi-Fi o el Bluetooth, esa conexión va a ir sin cable. Aunque sea similar a Chromecast y otros dispositivos parecidos, realmente no es igual. No vas a necesitar configurar, ni instalar nada. Son aparatos Plug and Play, con los que solo tendrás que conectarlos.

Básicamente, son dos dongles con tomas HDMI estándar que tendrás que conectar a cada dispositivo. Uno va a servir para transmitir, mientras que el otro recibirá la señal. Por ejemplo, puedes conectar uno a una videoconsola u ordenador portátil, mientras que el segundo lo vas a conectar a una pantalla o televisión.

Estos dispositivos van a estar compuestos por un cable con dos conectores: el HDMI y otro USB para recibir corriente. Incluso podrías enchufarlos a un cargador de móvil y recibir así energía. Hay diferentes modelos y puedes comprarlos en Internet.


Después de explicar cómo funcionan los HDMI inalámbricos, vamos a explicar si realmente son o no útiles. De primeras, pueden parecer una buena opción. No vas a tener que conectar tantos cables y ahorrarás espacio en casa, además de ganar en comodidad. Pero claro, también tendrán ciertas limitaciones.

Podemos decir que un HDMI por cable normal, va a ofrecer más estabilidad y calidad. Es algo así como conectarnos por Wi-Fi o cable Gigabit Ethernet. Si alejas demasiado los dispositivos, la calidad irá disminuyendo y pueden aparecer cortes. Por tanto, deberías utilizarlo lo más cerca posible.

Por ejemplo, de cara a jugar no son buena idea. La latencia va a aumentar, aunque sea ligeramente, y es algo que vas a notar. Tendrías que bajar la calidad de imagen, aunque incluso así podrías experimentar dificultades. Es algo que debes tener en cuenta, ya que dependerá del uso que le vayas a dar.

En definitiva, contar con dispositivos HDMI inalámbricos es una alternativa a los modelos con cable, pero debes ser consciente de las limitaciones. Cuidado con comprarlos para jugar, por ejemplo, ya que podrías notar que la latencia aumenta considerablemente.